miércoles, 9 de octubre de 2013

El Mató A Un Policía Motorizado - Groove 31/8


La primer vez que vi a El Mató fue en la noche en que Sonic Youth hizo su último concierto en Buenos Aires. Y aunque esa vez, el sonido en el GEBA de Figueroa Alcorta no haya sido el mejor, la banda me había llamado la atención por sus melodías y unas letras que encajaban perfecto para dichas melodías.
Pasó el tiempo, y el último día de agosto me los volví a cruzar. Groove era el lugar, y a decir verdad, los recintos cerrados son el mejor lugar para poder apreciar toda la magia de la banda de Santi Motorizado. Cada melodía que salía de las guitarras, cada nota de los teclados y del bajo y cada golpe de batería sonaron impecables.
A eso de las nueve y cuarto, el comienzo minimalista de
'El Magnetismo' me dio a entender que el show de los muchachos es un viaje. Y que lindo viaje. 'Mujeres Bellas y Fuertes' fue la segunda canción de la noche y la gente se encendió. A partir de acá, cada letra de cada canción fue cantada por un público extasiado
Soy uno de esos tipos que se toma su tiempo con los discos. Por eso, no conozco toda la obra de El Mató. Y por esto, las canciones mas viejas de la banda como 'Vienen Bajando' (la estuve cantando hasta el lunes) o 'Mi Próximo Movimiento' eran un descubrimiento fascinante para mí. Cabe decir que ante estas canciones, el público se exaltaba más. Cantaban cada vez más alto y a veces, dificultaba un poco escuchar lo que el bajista decía al micrófono. Pero estando tan inmerso en la propuesta de la banda, no era una molestia en absoluto. Todo lo contrario, era una bola de energía que te absorbía y hacía que, al minuto, estuvieras cantando con todos. La lista se basó mayormente en 'La Dinastía Scorpio' el disco que El Mató a Un Policía Motorizado sacó a fines de 2012 y sigue presentando desde entonces.
Después de varios amagues, (“Esta es la última canción” dijo Santi Motorizado más o menos seis veces) la canción que cierra dicho disco comenzó a sonar.
Los siete minutos y cuarenta segundos de la épica 'El Fuego Que Hemos Construido' marcaron el final de un show hermoso. Y obviamente, me dejaron con ganas de mas.




Corrosion Of Conformity - The Roxy Live 25/08

Le faltó pimienta.

Tenía mucha expectativa. Mucha. COC es una de las bandas que descubrí en 2011 cuando empecé a trabajar en radio.

Sabía que Pepper Keenan (cantante y guitarrista desde 1987 hasta 2006 cuando la banda entró en hiato) no iba a estar. No importaba. El disco homónimo de 2012 demostraba que el tridente original (Reed Mullin en batería, Woody Weatherman en guitarra y Mike Dean en bajo) tenía armas de sobra para bancarsela. Y con “Megalodon”, el ep salido a mitad del año pasado, confirmaron que estaban pasando por un gran momento.
Llegué al Roxy poco antes de las 21 hs. Corriendo, para variar. Después de comprar una remera en el enorme puesto de merchandising de Icarus, me ubiqué bien cerca del escenario.
Desde el momento en que entre al lugar, pude escuchar algunos comentarios: “Hace 20 años que los estoy esperando”. “Ojala toquen ‘Vote With A Bullet’”, “Se que salen por acá adelante siempre, así que voy a tener mi foto”.
Serían las 21:05 cuando Mullin, Weatherman y Dean subieron al escenario y pusieron en marcha esta locomotora. Porque Corrosion Of Conformity es eso, una locomotora que no se detiene nunca.
“Botton Feeder (El que como abajo)” y “Psychic Vampire” fueron las primeras dos canciones que nos partieron literalmente la cabeza. Y lo digo así porque el volumen fue realmente FUERTE. Durante la totalidad del show, los decibeles no bajaron nunca.
La gente hasta ahí, muy tranquila. Pero empezaron a sonar las notas con wah-wah de “Deliverance” y se acabó la paz. El primer gran pogo de la noche se dio con el cambio de ritmo de ese clásico de 1994. Woody, con su Gibson SG negra, siempre sonriendo y cruzando miradas con ese animal que es Reed Mullin tras los parches.
¿Mike? Concentrado en su bajo, tratando de escucharse.

Cuando sonó el riff de “Seven Days” como introducción a “Your Tomorrow”, Mike Dean empezó a quejarse de sus retornos. Haciendo caras y gestos, el colorado se molestó porque no había mejora alguna. Y esto tal vez influenció en que, después de la TREMENDA seguidilla “Mad World”-”Hungry Child”-”Priest Brains”, la banda se haya retirado sin decir ni chau.
Si. Cuando el show comenzó a ganar temperatura; cuando la gente empezó a despabilarse, fue en ese momento en el que la banda se fue y no volvió más. Poco menos de 1 hora de show. Una lástima porque, entre que estos tipos juntos suenan ajustadísimos (30 años tocando juntos se notan) y el volumen era el IDEAL, daba todo para ser una noche muy superior a la que fue.
Apenas comenzó el “vamos saliendo chicos” de la gente de seguridad, también empecé a oír eso de “romper todo” (muchos recordando lo sucedido en Hangar con Motörhead en 2004) y también, a algunos que pedían un disco como “reembolso” (la entrada costaba casi 300 pesos). Y había otros que ya sacaban hipótesis: que el retorno, que la gente; que no se la bancan sin Pepper. Más allá de todo, nunca vamos a saber bien qué pasó.
Espero vuelvan pronto (con o sin Keenan) y den un show mas a la altura de su historia. Con estos 50 minutos en los que se mezcló Black Sabbath y el Crossover, solo pudimos contemplar un poco de la magia de Corrosion Of Conformity.
Corrosion Of Conformity Written by @reznik__

viernes, 4 de octubre de 2013

Peter Hook & The Light - Teatro Vorterix 02/10/13


Unknown Pleasures

¿Cómo describir un show en el que se tocaron canciones que jamás pensaste que podías llegar a escuchar?
El 2 de Octubre, Peter Hook vino junto a The Light, su principal proyecto después de dejar New Order en 2007. Y llegó al Vorterix para presentar 'Movement' y 'Power, Corruption & Lies' los dos primeros discos de ese grupo, más algunas canciones de Joy Division.
Era martes y se empezó a comentar, en base a tweets de Hook, que se iba a hacer un set de Joy Division previo al set principal.
“Que lo tocan ellos; que es una banda soporte haciendo temas de la J; que Hook sale y hace un par de canciones”. Muchas especulaciones y pocas certezas. HASTA, que el día miércoles se confirmó lo que todos esperaban: un set de Joy Division interpretado por uno de sus creadores. 20:15 era la hora pautada.
20:10 ya sonaba 'Atrocity Exhibition' y a partir de ahí todo fue una gran cosa indescriptible. De no haber visto la lista de canciones apenas finalizado el set, no tendría ni idea de lo que pasó. El bajista nos regaló 8 placeres desconocidos para la gran mayoría de los presentes. 8 gemas que, como dije al principio, jamás pensamos que podríamos escuchar en vivo. Porque, siendo realistas, ¿quién hubiese pensado que Hook después de girar con los álbumes de Joy Division por dos años iba a despacharse con esto? Pocos. Yo no lo esperaba. Y estoy seguro que muchos de los que estuvieron en Colegiales esa noche tampoco. Esta primer parte del show me permitió sacar varias conclusiones:
-El sonido sería PERFECTO durante todo el show. Lo único criticable sería que a la voz de Peter le hubiese venido bien un poco más de volumen, ya que entre tanto bajo a veces se perdía.
-La banda es un relojito suizo. Cada nota, cada sonido, estuvo ahí. Hasta parecía fácil. Mención aparte para el batero Paul Kehoe, una máquina que no paró en todo el show.
-Por último, la influencia de la música de Ian Curtis en Sumo. Ya lo había notado en los discos, pero en vivo, fue mucho más palpable. Hasta me di el lujo de cantar encima de 'Disorder' el “Agosto, agosto” de Luca.

Para cuando arrancó el set de New Order, en el teatro se notaba la ansiedad y felicidad de la gente. Y también de Peter Hook y su banda. Porque al inglés lo vi sonreír durante gran parte del concierto. Y digo: ver al artista reírse junto a sus compañeros, ver que realmente la está pasando bien arriba del escenario, ¿no le da un plus al show? Se nota la energía, se notan las ganas. Y en cada canción del set de New Order, ya sea más oscura o más bailable, se notaba la felicidad de Hook por seguir arriba de un escenario, tocando ESAS canciones que todos querían escuchar. Es irrelevante que ahonde en la lista de temas porque, sinceramente, los recuerdos son una gran bola y no puedo más que contar en detalle el final del show.
La noche la cerró una increíble versión de 'Love Will Tear Us Apart' que dejó a los presentes extasiados. La gente aplaudió hasta el cansancio a una banda que realmente se esforzó por hacernos disfrutar del show. Hook, ya solo en el escenario, regaló su remera al público con una sonrisa de oreja a oreja.
Un tipo que disfruta de tocar dije.



Escribió: reznik__